domingo, 7 de febrero de 2016

Beneficios de Dormir Una Buena Siesta


Dormir la siesta es una de las costumbres más saludables que existe, siempre que se haga de forma correcta. Nuestro cuerpo se regenera física y mentalmente. Descansar un poco después de la comida es una costumbre bastante antigua que aunque es practicada por muchos pueblos, generalmente se asocia a las naciones herederas de la cultura grecolatina; de hecho, la palabra siesta proviene del verbo “sestear” que los romanos crearon para designar el descanso acostumbrado en la “hora sexta”, que en nuestra actual forma de medir el tiempo corresponde al periodo comprendido entre las 14:00 y las 16:00 horas.
Beneficios de dormir la siesta para la salud:
  • disminuye los riesgos de padecer enfermedades cardiovasculares en un 37%.
  • aumenta la capacidad de concentración del individuo en un 34%.
  • mejora la capacidad ante el estado de alerta debido al sueño reparador.
  • disminuye el grado de estrés.
  • produce una mejora de la digestión (siempre que las comidas no sean muy copiosas) porque relaja los músculos que intervienen en el aparato digestivo.
Dormir Una Buena Siesta 

Para dormir bien, debes asegurarte que el 
lugar de tu siesta sea tranquilo, sin ruidos y que la temperatura es agradable. En lo posible, también es importante que no haya luz para dormir. Ten en cuenta que si duermes muy tarde la siesta, puede afectarte en el sueño por la noche. Además, las siestas pueden tener algunos inconvenientes: por ejemplo, la inercia del sueño, esa sensación de desorientación que muchas personas sientes por diez o veinte minutos luego de dormir, y algunos estudios han relacionado la siesta con un mayor riesgo de fallo cardíaco.
Aquí te dejo 6 recomendaciones para Dormir una buena siesta:
1) Debe ser corta.
Más allá de los 30 minutos corremos el riesgo de levantarnos atontados y aún más cansados. Lo ideal es que dure 26 minutos para ser exactos. 
2) No meterse en la cama.
 Un sofá o una hamaca son lugares mucho más indicados para una siesta.


3) Ventanas abiertas.
Para favorecer la oxigenación durante la siesta es mejor descansar con alguna ventana abierta o, mejor aún al aire libre (en verano, a la sombra).
4) Ayudar a digerir.
Dormir la siesta facilita el proceso digestivo, ya que el cuerpo solo debe preocuparse por cumplir esa misión. Sin embargo, mejor será no abusar de alimentos fuertes ni de comidas copiosas.
5) Atender el reloj biológico.
Siguiendo la norma de una siesta corta, cada uno debe escuchar lo que le pide su propio reloj corporal.
6) Sucumbir a la tentación.
No confundir siesta con pereza. Un descanso reparador es un excelente estimulante para mantener el ritmo.
La necesidad de relajación que sentimos después de la comida está íntimamente ligada al descenso energético que sufre el organismo después de comer. Todo ello tiene una explicación fisiológica: el tubo digestivo necesita un mayor aporte de sangre para cumplir su función, así que los músculos, la piel e incluso el cerebro quedan en un segundo plano y las actividades nerviosas, respiratorias y circulatorias se ven alteradas por el menor aporte de sangre.
Es por esto por lo que somos incapaces de levantarnos de la mesa con el último bocado y seguir a pleno ritmo. ¡Y cuanto más copiosa o pesada haya sido la comida, más trabajo tendrá el cuerpo para digerirla!
Dormir y descansar forman parte de los ritmos de la naturaleza, como los ritmos del sol y la luna. Nuestro reloj interno depende también de estos ciclos, aceptando además que es él quien nos marca nuestra necesidad de breves descansos.
Lo de tomarse un té o un café después de comer para despejarnos no tiene mucho sentido. ¿Para qué interferir en esa necesidad de relax que tiene nuestro cuerpo enmascarando la relajación muscular y cerebral con el consumo de sustancias excitantes? Al principio puede dar resultado, pero al cabo de unas horas, el rendimiento físico e intelectual desciende repentinamente y cada vez necesitamos mayores cantidades de excitantes para seguir a pleno ritmo.
El objetivo de la siesta, por el contrario, es estabilizar las funciones físicas y mentales, colaborando con nuestro organismo en lugar de luchar contra él.




puedes ver todos nuestros artículos en www.purito.com.ar/libros

 Te Gustó? Ayúdanos a llegar a Más Personas Compartiéndolo en Las Redes Sociales!

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Gracias por participar en nuestro Blog, y no te olvides de compartir este articulo en tus redes sociales si es que te ha gustado el mismo.