Desgraciadamente, demasiados de nosotros tenemos momentos difíciles para poder dormir, y aun cuando lo logramos, frecuentemente nos despertamos. Si desea un sueño nocturno y consistente, necesita aprender primero a relajarse, para después dormirse. Aquí hay tres modos diferentes con los que puede relajarse con el fin de preparar su cuerpo para el sueño que necesita.
Una de las formas más fáciles para relajarse es asegurarse de que usted no está estimulando su mente en forma inconsciente o involuntaria. Esto se hace a menudo a través de un modelo de pensamiento que ocurre como resultado de leer o meditar en algo que genera provocadores de pensamientos. Esto puede ocurrir, sin embargo, también como resultado de estar mirando un programa de televisión o quizás una película. Meditar acerca de cosas relajantes pondrá nuestras mentes y cuerpos en una posición en dónde el sueño llegará naturalmente.
La segunda cosa que usted necesita es librarse de todo alcohol que usted haya estado bebiendo por la noche. Muchos pensamos que estamos ayudando a nuestro cuerpo a dormir si tomamos alcohol, pero la verdad sobre este asunto, es lo contrario. Si bebemos hasta desmayarnos, no podemos estar permitiendo a nuestros cuerpos conseguir el sueño profundo que necesitamos y quedarnos dormidos durante la noche.
Finalmente, necesitamos asegurarnos que nuestro ambiente nos conduce a la relajación. No nos sirve de nada sentarnos a meditar o hacer algunos ejercicios respiratorios profundos, con la televisión sonando de fondo. Asegúrese de que el ambiente que lo rodea, está acondicionado para ayudarlo a lograr sus metas.
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